miércoles, 10 de noviembre de 2010

"Todo é silencio", de Manuel Rivas

2 comentarios:

Carlos Miguez dijo...

No me ha gustado nada. Me parece un relato endeble y superficial, y costumbrista en el peor sentido de la palabra. Rivas se autolimita al obsesionarse por reflejar su dominio de cierta fraseología, en cuyo poder metafórico parece querer hacer sostener toda la novela. Como eso es imposible, porque una novela es un texto y un texto es un tejido, la historia se cuenta de manera completamente superficial, sin densidad alguna. Todo el ingenio puesto para conseguir incansablemente la frase sentenciosa y dramática, se le hurta al desarrollo de los personajes y de la historia: los unos se quedan en simples esbozos, y la otra en simple historieta.

Tarabelo dijo...

Certo! O que dis dos personaxes e a historia retrata a novela. O "estilo" é outra cousa e o "estilo" Rivas paréceme unha marabilla, pero xa o coñeciamos e se non serve para nada máis ou non se acompaña de nada máis, redúcese a pura pirotecnia.